Al parecer, cuando eres un desarrollador independiente no tienes que preocuparte por vender un millón de copias de tus títulos; es probable que sólo sea necesario preocuparse por hacer el juego que quieres, sin ataduras, con libertad pura. Gracias a esto a veces llegan a nosotros opciones fantásticas con ideas frescas e impresionantes. Hammerfight viene de un estudio independiente ruso que ha intentado crear una dinámica nueva de juego. ¿Logrará sorprendernos o simplemente quedará como un título raro que pocos podrían disfrutar?

La historia es básicamente la vida de un joven guerrero que pertenece a un clan que ha sido exterminado casi por completo y sus enemigos lo han tomado como prisionero. Aquí usarás un vehículo volador extraño, algo similar a un helicóptero que puede usar como arma bolas de acero, espadas y más para terminar con criaturas originales y otros enemigos. El juego realmente podría ser genérico a los ojos del observador, pero hay dos cosas que lo hacen único en comparación a los demás: los controles y la física, lo necesario para conseguir que lo estelar sea el combate.

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Controlas tu nave con el mouse, así que puedes imaginar a este dispositivo como la nave y que esta se moverá en la dirección que ordenes y la manera de atacar es usando el arma colgante, así que tendrás que mover el mouse en círculos para propinar ataques fuertes. La física del juego es real: cuando hagas un círculo rápido para atacar con más fuerza en una dirección, podrás ver cómo tus enemigos terminan destrozados, claro si logras ejecutar el movimiento de manera correcta.

En este mismo aspecto, diremos que en general los combates son satisfactorios, pues mientras las batallas aéreas se llevan a cabo, verás a tus contrincantes estrellarse contra las paredes y otros elementos del escenario. Hammerfight puede ser un juego bastante divertido, si haces bien cada cosa, además de que las gráficas están bien hechas y tiene buenos efectos sin necesidad de usar altos requerimientos de sistema.

Es cierto que en papel suena bien el tipo de control, pero en la ejecución es diferente, además de que tardarás mucho tiempo en aprender a atacar efectivamente, y este es el gran problema de Hammerfight, pues aún cuando en la mecánica de juego lo más importante es el control, no es tan responsivo como para tener una experiencia de juego que no sea frustrante.

Los escenarios a veces son confusos y en ocasiones te estrellarás contra algunas paredes que parecen estar en otro plano. También sucede que los efectos de física funcionan en tu contra, por ejemplo, me encontré atrapado entre un enemigo y una estructura sin poder moverme por un rato y recibiendo daño, pero lo que me molestó más es encontrar misiones donde tienes un compañero que te estorba más de lo que ayuda, varias veces fui golpeado por mi amigo y quedé aturdido varios segundos recibiendo daño de los enemigos.

Hammerfight definitivamente es un buen intento por traer un título con mecánicas de juego inusuales y originales, tal vez su ejecución no sea tan buena como para recomendársela a todo tipo de jugador, pero seguramente aquellos que gustan seguir a los creadores independientes, quieran darle un vistazo.