Digamos que controlo a Trevor y, como suele pasar en GTA, lo pongo a hacer destrozos hasta alcanzar la quinta estrella de búsqueda; luego, en el calor del enfrentamiento con la policía, salto a Michael, que está cocinando en su casa. ¿Cuando regrese a Trevor, seguirá en el mismo punto donde lo dejé sin importar cuánto tiempo pase? ¿Estará en la cárcel? ¿Perderá atributos? ¿Lo resolverá solo? Los escenarios son fascinantes y prácticamente involucran terrenos de universos paralelos.
¿Qué tal que llevamos la persecución de Trevor al lugar en donde se encuentra Franklin? ¿Podrá ayudar a Trevor? ¿Qué pasa si los 3 personajes tienen el máximo nivel de búsqueda al mismo tiempo? Nótese además que en este punto no hablamos de asaltos o misiones formales, sino de situaciones aleatorias, lo que nos lleva precisamente al tópico del azar.
Con Red Dead Redemption, Rockstar introdujo un generador de eventos azarosos para inyectarle vida a las desérticas planicies del Viejo Oeste y funcionó de maravilla. Podías andar a caballo y toparte, de pronto, con el asalto a una diligencia, una damisela en peligro, una emboscada de ladrones o un hombre que pedía auxilio.
No nos sorprendería que fuera un andamiaje similar el que gobernara las circunstancias en las cuales encontráramos a Michael, Franklin y Trevor al alternarlos. De hecho, aunque titánica, esa sería la solución más atractiva, porque de otro modo, tarde o temprano conoceríamos todos los estados posibles de los protagonistas. El problema es que si los eventos son aleatorios, el relato de cada uno demoraría mucho en avanzar, se estancaría o divagaría antes de ofrecernos un acontecimiento realmente trascendente.
La alternativa más rígida, aunque quizá la más factible es que los eventos en los que encontramos a los protagonistas cada vez que los alternemos sean predeterminados y siempre conduzcan a un hecho importante para la historia de cada personaje. En otras palabras, es probable que caigamos sobre Franklin cuando esté en una actividad que lleve directamente a una misión para que su historia avance y, en última instancia, el juego avance también.
Las preguntas permanecen. ¿Qué pasa si luego del primer segmento del juego, cuando sólo puedo controlar a un personaje a la vez, me desentiendo de los otros 2 y sólo uso uno? Se nos ocurre ver la clásica pantalla que diga: Michael y Franklin se encuentran en un nivel de desarrollo muy bajo. Desarróllalos para poder avanzar a la siguiente misión. Quizá tengamos libertad, pero es probable que la siguiente misión se torne notoriamente más difícil al tener un equipo desequilibrado.
Hasta ahora, hemos dejado un poco de lado el tema de los talentos. Franklin, Michael y Trevor tendrán, cada uno, cualidades especiales, pero también un repertorio de habilidades a desarrollar, que van desde puntería hasta condición física, manejo, etcétera. Al margen del progreso en sus respectivas historias, tópico que ya abordamos, está el de su desarrollo de atributos y la asignación de tareas durante los asaltos. Sabemos que Trevor es el piloto por default, pero esperemos que sea posible poner a Michael tras el volante, si es el más desarrollado de los 3 en esa tarea en un momento determinado.
Es justamente a esto a lo que se refieren quienes piensan que Rockstar realmente podría revolucionar el concepto de mundo abierto y los videojuegos en general, con su aproximación a lo que, a falta de algo mejor, podríamos denominar multiprotagonismo.
Sí, estamos conscientes de que este artículo plantea interrogantes adicionales y ofrece pocas respuestas, pero el hecho es que Rockstar se adentrará en terrenos inexplorados y sólo nos queda imaginar los alcances de su propuesta. Lo seguro es que si Rockstar tiene éxito con esta fórmula, en el futuro próximo veremos otros videojuegos tomar el mismo camino.
Como quiera que sea, no podemos cuestionar el apetito de progreso de Rockstar y la ventaja indiscutible de GTA V y sus múltiples protagonistas; en definitiva, será un juego enorme, adictivo y profundo.
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