Definitivamente nadie esperaba que el 3DS se tornara en la auténtica pesadilla comercial en la que se está convirtiendo, y mucho menos Nintendo. De abril para acá, la compañía oriunda de Kioto reportó pérdidas por cerca de $400 millones USD, lo que por supuesto ha impactado en las estimaciones de ganancias para los próximos 12 meses, las redujo poco más de $1,100 millones USD, para dejarlas en $250 millones, es decir, 82% menos.
Durante los pasados tres meses, únicamente se han despachado 700 mil unidades de 3DS alrededor del mundo, mientras que en el mismo lapso de tiempo, el Nintendo DS alcanzó a desplazar más de 1.40 millones de unidades.
Además de culpar a las decepcionantes ventas de la plataforma autoestereoscópica, Nintendo arguyó escasez de títulos así como fuertes gastos en el departamento de desarrollo e investigación, orientados a su próxima consola de sobremesa, Wii U. Cabe recordar que recientemente fue cancelado Mega Man Legends 3 y Metal Gear Solid: Snake Eater fue retrasado hasta 2012, dejando a The Legend of Zelda: Ocarina of Time como el único juego genuinamente AAA para la portátil.
En perspectiva, Satoru Iwata, director general de Nintendo, había predicho que el 3DS vendería 15 millones de juegos para finales de marzo; la cifra real es de 4.53 millones para finales de julio, poco más de 10 millones por debajo de la meta preestablecida.
En una medida que podría considerarse desesperada, Nintendo acaba de bajar el precio del 3DS alrededor del mundo, instando a los fanáticos a aprovechar y comprar ahora.
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