Como si el pleito legal de Activision contra Jason West y Vince Zampella no tuviera a la compañía con suficientes asuntos en los tribunales, tal parece que una cláusula en el acuerdo firmado por ellos durante el juicio por regalías del 2010 podría afectar al recientemente anunciado Call of Duty: Black Ops 2. Aunque Activision conserva los derechos sobre la franquicia CoD, los juegos ubicados en "días modernos (después de Vietnam), en el futuro cercano o el futuro cercano" serían propiedad de Infinity Ward.
Debido a que Black Ops 2 ocurre en el año 2025, la ubicación temporal toma un matiz legal, el cuál técnicamente sería propiedad de Infinity Ward. Un abogado con especialidad en propiedad intelectual dijo que si West y Zampella ganaran la demanda, Activision tendría que retirar el juego de circulación en prejuicio de Treyarch; sin embargo, lo más probable es que se llegue a un acuerdo económico.
Otro asunto en jerga legal implica una cláusula entre el acuerdo de Infinity Ward y Activision: según una cláusula del acuerdo, los términos del memorandum que darían propiedad a IW sobre las locaciones futuristas de la franquicia sólo son válidas si el estudio es empleado por Activision; como ese ya no es el caso, Activision podría tener via libre para BO2, pero será algo que deberá atenderse en los tribunales. Dado que el juego ya está rompiendo récords de preórdenes, lo más probable es que los abogados del gigante de la distribución den prioridad a este caso.
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