Estudio de Yogventures! explica por qué fracasó el proyecto

El pasado 17 de julio de 2014, reportamos que el estudio Winterkewl Games anunció la cancelación de Yogventures!, título financiado mediante Kickstarter y basado en el popular canal de YouTube, Yogscast, debido a múltiples problemas de los que no compartió muchos detalles. Sin embargo, recientemente la compañía explicó a fondo cuáles fueron las dificultades que la llevaron a suspender el desarrollo del juego.

En un post en la página del proyecto, Kris Vale, diseñador en jefe del título, aclaró que la falta de dinero fue la razón principal para la cancelación de Yogventures!. Uno de los problemas más contundentes, según él, fue cuando un artista conceptual al que le pagaron una fuerte suma abandonó el proyecto después de 2 semanas.

“Debido a que hicimos un contrato que garantizaba que cada uno de los artistas principales recibiría un pago de $35,000 USD de contado y no hicimos alguna cláusula de cómo o cuándo alguien podía legalmente dejar de trabajar en el proyecto, el artista recibió su pago, trabajó 2 semanas y luego dejó de trabajar.”, escribió Vale. “No teníamos forma de obligarlo a devolver los fondos y fue una amarga lección la que aprendimos.”

Cuando Lewis Brindley, cofundador de Yogscast, se enteró de los problemas, exigió que Winterkewl devolviera el dinero que restaba de Kickstarter, de manera que pudieran fabricar y enviar las recompensas físicas que prometieron a quienes los financiaron; además, especificó que también contratarían un programador para terminar el juego. Al final, de los $567,665 USD que recaudaron, el estudio sólo entregó $150,000.

A pesar de recibir el dinero, parece que los miembros de Yogscast jamás consiguieron a alguien para concluir el desarrollo, aunque Brindley explicó en un post en reddit que no están listos aún para dar su versión de los hechos, pero que su equipo hace todo lo posible por rectificar los errores que cometió Winterkewl.

Sin embargo, ninguna de las 13,647 personas que financiaron el proyecto recibirá un reembolso, dado que el estudio está en bancarrota después del fracaso del juego y a que Brindley no se hace responsable del dinero perdido.