Los peores Sidekicks de la historia

Estar acompañado nunca fue tan molesto


Las
historias de los juegos de video son como cualquier otra historia, tienen
héroes, damiselas en apuros, villanos, mercaderes y sidekicks. ¿Qué es un
sidekick? Básicamente es el acompañante de cada héroe, el Robin de cada Batman,
el Kato de cada Avispón Verde, vamos, el James Bond de cada Rex. Normalmente,
uno pensaría que tener un compinche sería la cosa más genial del mundo, ¿quién
no quisiera ir por la vida pateando traseros y compartiendo las glorias de la
batalla con alguien más? ¿No?

 

Desafortunadamente,
no todo en la vida es miel sobre hojuelas, no. El universo de los videojuegos
está plagado de infinidad de criaturas molestas que se han dado a la tarea de
hacer tu vida imposible, tan detestable que no podrás esperar a la siguiente
zanja con cocodrilos para aliviar tu miseria. Existen compinches tan molestos,
seguidores tan odiosos, que a veces nos hacen desear tener a la mano un hacha o
una escopeta y enseñarles por qué no es una buena idea caerle mal al héroe de
la historia.

 


¿Bailamos el Bati-Twist?
¿Bailamos el Bati-Twist?

Pero ¿para
qué cansarte con eso? Aquí están los peores sidekicks en la historia de los
videojuegos:

 

  • Sancho – Dragon Quest V: Hand of the Heavenly Bride.

 

OK, estamos
hablando de una persona que te vio nacer, que era como el amigo eterno de tu
padre, un ser que te recibió en su hogar cuando regresaste de tus
aventuras y eras sólo un pequeño niño. Este supuesto amigo permitió que fueras
convertido en un esclavo durante diez años y te dio por muerto. Posteriormente,
cuando lo encontraste de nuevo en tus aventuras, se convirtió otra vez en tu
mejor amigo, hasta que fuiste transformado en estatua de piedra y llevado a una
de las 20 locaciones en un mundo que se recorre de punta a punta en menos de 2
minutos. Obviamente, se tardó otros diez años en dar contigo. Uno de los peores
sidekicks de todos los tiempos, merece morir en la hoguera.

 


Te odio. ¡Gracias por nada amigo!
Te odio. ¡Gracias por nada amigo!

  • Diddy Kong – Donky Kong Country.

 

Ya es
suficientemente horrible tener a un pequeño sobrino queriendo ser tú y
molestándote todo el tiempo. Ahora imagina que le encargas que cuide toda tu
dotación de plátanos durante las frías noches otoñales, y terminas por descubrir que
el pequeñajo dejó que un cocodrilo con aires de grandeza se robara hasta la
última penca, mientras él se escondía en un barril cercano. Pero lo peor estaba
por venir, este admirador se la pasó tramando durante todo un año, con
algún contacto desconocido en Rare, cómo despojarte de tu papel protagónico; en 1995 ya tenía su propio videojuego, en el cual un villano te había
secuestrado convenientemente para que él tuviera la oportunidad de lucirse y
hacer todo lo que en realidad te tocaba hacer a ti. ¿Casualidad? Yo diría que
no.

 


Sólo te uso para escalar a la gloria
Sólo te uso para escalar a la gloria

  • Miles “Tails” Prower - Sonic the Hedgehog.

 

Si cuando
decidiste tomar el papel de superhéroe tu propósito era que todo mundo pensara
que eres rarito, entonces Tails es el compinche perfecto para ti. No sólo es un
zorro, es un zorro modificado genéticamente, poseedor no de una, sino de dos
colas que le permiten andar volando por ahí con el trasero en alto, soltando
frases ridículas y básicamente, poniéndote en vergüenza por todo el mundo. Al
final no importa qué tan rápido seas, jamás será suficiente
para escapar a este tipo de asociaciones.





¡Ya déjame en paz!
¡Ya déjame en paz!

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