Historia de los juegos de ritmo

El origen de los géneros que marcaron el compás en nuestras vidas


Consolas

PaRappa The Rapper

Este es considerado el primer juego de ritmo que logró destacar. Masaya Matsuura, un diseñador de juegos que entonces era líder de un grupo de hyper pop japonés de nombre PSY S, creó PaRappa The Rapper en 1996.

Es probable que lo que más recordemos de PaRappa sea su estilo gráfico, que consistía en personajes aparentemente bidimensionales (como recortes de papel), dentro de entornos tridimensionales.

La historia tenía poca coherencia e importancia, y trataba sobre los intentos de PaRappa por conquistar el corazón de la chica de sus sueños, cuyo nombre era Sunny Funny, y las dificultades que se presentaban en el camino del héroe se resolvían o se combatían con el poder de la música. Además, tenía un enemigo que era un ricachón llamado Joe Chin.

La historia fluía entre cinemas y canciones, las cuales tenían secciones en las que se te pedía presionar los botones del control del PlayStation al ritmo de la música. Una experiencia muy agradable que engendraría la secuela UmJammer Lammy, donde había diferentes personajes, y que una vez que lo completabas, era posible desbloquear a PaRappa. Entonces este cantaba las canciones de los escenarios superados en una versión propia. Hubo una edición Arcade del título original, además de una secuela directa de nombre PaRappa the Rapper 2 que salió en 2001 para PlayStation 2 y una reedición para PSP en 2006. También contó con su propio programa de televisión en Japón en 2001.

PaRappa the Rapper desencadenó una fiebre por los juegos de ritmo que se manifestó fuertemente en el año 1998.

PaRappa the Rapper tal vez no fue el primero en llegar, pero sí uno muy exitoso
PaRappa the Rapper tal vez no fue el primero en llegar, pero sí uno muy exitoso

Bust-A-Groove

Este juego apareció en enero de 1998 en Japón, en noviembre salió en América y en diciembre en Europa.

Se trata de un juego de ritmo con personajes muy carismáticos, cada uno representando un género musical, desde hip-hop, hasta house y breakdance, pasando por disco, jazz, vogue y más. Muchos adoraron a Kitty-N, Shorty, e incluso a un personaje que tenía cierto parecido con Jamiroquai, de nombre Heat.

El objetivo era vencer en enfrentamientos de baile a tus oponentes, como en un juego de pelea: viajabas a los sitios donde habitaban tus contrincantes y los retabas a bailar hasta llegar a un jefe final, el cual era un robot gigantesco. Cada personaje reflejaba muy bien el género musical del tema que lo acompañaba.

Frente a tu personaje aparecía un espacio dentro del cual se incluían los comandos que debías introducir por medio del D-Pad y que brillaba al compás de cuatro cuartos, que es el ritmo más común en la música. Tenías que calcular el tiempo de presión de las flechas que se mostraran para oprimir el botón que aparecía al lado derecho de este espacio, y debías hacerlo justo al cuarto tiempo del ritmo marcado.

Si presionabas el botón de ataque en lugar de las opciones que se te ofrecían al final de la secuencia, entonces lanzabas un ataque especial a tu oponente que lo hacía perder su racha y te daba mucha ventaja.

Hubo una versión Arcade que sólo vio la luz en Japón; su secuela: Bust a Groove 2, llegó a los anaqueles de Asia en 1999 y en el año 2000 a América. Incluía nuevos personajes, música y un movimiento final llamado Fever Time. Hay una tercera entrega que tampoco se vendería fuera del país del sol naciente: Dance Summit 2001.

Pantalla de inicio de Bust A Groove
Pantalla de inicio de Bust A Groove

Comentarios

 
 
  • Mejores

  • Nuevos

    Advertising
    Advertising