Hypergryph nos invitó a Los Ángeles, California, para confirmarnos que quieren que el futuro de Arknights se viva a un nuevo nivel. Durante nuestra visita en la ciudad de Estados Unidos, tuvimos la oportunidad de jugar varias horas la Beta Test II de Arknights: Endfield, conocer al equipo detrás del proyecto y entender la magnitud de lo que buscan lograr.
Podemos adelantarte algo: Endfield es más que un salto técnico para la saga; es una apuesta audaz por construir un universo abierto, expansivo y con identidad propia. Sigue leyendo para conocer nuestras primeras impresiones de esta propuesta que luce bastante prometedora.

Un universo que se siente vivo
Arknights: Endfield es un RPG de acción y estrategia con elementos de gestión, ambientado en el mismo mundo del exitoso Arknights, pero llevado a una escala completamente nueva. Mientras el título original giraba alrededor de la táctica y la planificación desde una perspectiva 2D, Endfield propone una experiencia 3D completamente inmersiva, donde la exploración, el combate y la construcción conviven de forma orgánica.
En la Beta Test II que probamos, el escenario principal fue Wuling City, una región que combina arquitectura tradicional con un estilo sci-fi moderno y que crea un contraste visual impresionante. Los desarrolladores nos explicaron que este mapa refleja la dualidad que define al juego: un futuro tecnológico envuelto en raíces culturales y espirituales. Y lo cierto es que se siente como un lugar vivo, con historia y personalidad propia.
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Primeras horas de juego: un inicio denso, pero prometedor
Durante nuestra sesión, que duró alrededor de 7 horas, tuvimos la oportunidad de experimentar desde el tutorial inicial hasta secciones más avanzadas del nuevo mapa. La primera impresión fue que Endfield abruma un poco al comienzo: hay muchos sistemas, menús, tutoriales y ventanas que se abren sin parar. Si eres nuevo en este tipo de títulos, sentirás como si te arrojaran a un océano de información sin salvavidas.
Con el paso de las horas, el juego empieza a fluir de manera natural. Las mecánicas de combate se vuelven más intuitivas, las combinaciones de habilidades fluyen con el control y cada misión deja ver un ritmo más equilibrado.
Pudimos jugar con un control de PlayStation 5 y debemos decir que el esquema de botones está bien pensado, algo vital para un título que combina acción en tiempo real con gestión.

Un combate sorprendentemente dinámico
El combate de Arknights: Endfield fue una de las sorpresas más agradables. Formamos un equipo de personajes intercambiables en tiempo real, cada uno con habilidades únicas, estilos y roles diferentes. Puedes alternar entre ellos libremente durante el combate, y eso da lugar a coordinaciones muy interesantes: ataques combinados, habilidades especiales compartidas y estrategias en constante evolución.
El resultado es un sistema que logra sentirse fresco y emocionante, incluso en combates largos. No tiene la precisión milimétrica de un souls, por ejemplo, pero sí un nivel de dinamismo que lo diferencia de otros RPG con estética de anime.
El equipo de desarrollo comentó que uno de sus objetivos era ofrecer “mayor inmersión y profundidad estratégica”, y lo están consiguiendo.

La otra cara de la moneda: construir, producir y expandir
Una de las mayores diferencias respecto al Arknights original es su sistema de construcción y gestión de fábricas (AIC Factory Gameplay). Aquí, el jugador puede crear y administrar instalaciones que sirven para producir recursos, energía o bienes que luego se utilizan en misiones. Durante nuestra prueba, colocamos antenas para distribuir electricidad y bombas para regular el flujo de agua en distintos canales. Este sistema es ambicioso y nos pareció tan interesante como abrumador.
La idea es que el jugador combine exploración, combate y gestión para expandir su base y dominar las zonas del mapa. Al principio puede ser confuso porque hay muchas opciones, muchos menús y demasiadas instrucciones simultáneas.
Aunque el nuevo Blueprint System busca facilitar el aprendizaje mostrando planos y sugerencias para construir, sigue siendo un punto que podría pulirse para los jugadores nuevos en el género.
Un deleite audiovisual
Si algo queda claro al jugar Endfield, es que Hypergryph está invirtiendo en ofrecer una experiencia visual y sonora de primer nivel. El apartado gráfico es impresionante: entornos amplios, iluminación dinámica y animaciones de alta calidad.
Las cinemáticas, completamente renovadas para esta Beta test II, lucen espectaculares y refuerzan la inmersión en la historia. Además, el diseño de personajes es otro punto fuerte.
En esta versión se sumaron 9 personajes nuevos, por lo que ya hay más de 20 disponibles y cada uno destaca por su estética y personalidad. Entre ellos, vale la pena mencionar a Perlica, cuyo diseño, según contó el productor Light Zhong, nació en uno de sus sueños, un detalle que muestra la pasión que hay detrás del proyecto.
En lo musical, el juego brilla con fuerza. El OST está compuesto en colaboración con la banda estadounidense de rock y metal alternativo Starset, lo que le da un tono épico y emocional. Si eso no fuera suficiente, la música acompaña cada situación de manera precisa: se intensifica en combate, se relaja en la exploración y emociona en los momentos narrativos clave.

El juego busca una mayor accesibilidad, progresión y ritmo
Una de las principales preocupaciones de los desarrolladores fue la accesibilidad. Endfield introduce cambios importantes para que los jugadores nuevos no se sientan tan perdidos: tutoriales más claros, referencias visuales y un diseño de misiones más compacto. No obstante, y como mencionamos, es algo que se sigue puliendo.
Por otro lado, las misiones son algo cortas, lo cual ayuda a mantener una sensación de progreso. Durante nuestra sesión, notamos que el juego se vuelve más satisfactorio conforme dominas sus sistemas.
El ritmo es fluido, las recompensas son constantes y cada pequeña victoria se siente como un paso enorme hacia adelante. Si bien los primeros combates pueden resultar repetitivos, esto cambia rápidamente cuando se desbloquean más personajes y habilidades.
Una Beta pulida y con visión a futuro
Técnicamente, Arknights: Endfield se siente muy estable. Pese a tratarse de una beta, el rendimiento fue excelente: fps estables, cargas no tan rápidas pero decentes y transiciones suaves.
La interfaz es limpia, al menos para el género, la localización a un español neutro ayudó muchísimo a seguir la historia y los tutoriales de forma cómoda, y no encontramos errores graves durante nuestras horas de prueba.
En cuanto al contenido, Hypergryph confirmó que esta Beta Test II ofrecerá 50 a 60 horas de juego promedio, algo impresionante para una versión preliminar. Incluso, el estudio nos compartió que planea incluir elementos sociales, como la construcción compartida o la posibilidad de cooperar con otros jugadores. Sin embargo, eso estará disponible más adelante.
Respecto a la monetización, los desarrolladores fueron cautelosos, pero dejaron claro que buscarán un modelo justo, sin depender totalmente del sistema gacha clásico. El objetivo, según explicaron, es que el progreso dependa más de la exploración y la gestión que de la suerte.

Wuling City, una muestra de ambición artística
El nuevo mapa, Wuling City, es sin duda la joya visual de esta Beta. Su mezcla de arquitectura tradicional con tecnología futurista da como resultado un entorno lleno de vida y detalle.
El equipo mencionó que buscaban “un balance entre estilo y realismo”, y se nota en cada rincón: las sombras, los reflejos, la vegetación y hasta los mercados locales transmiten historia y coherencia. Además, todo se siente en movimiento y eso se agradece.
La sensación de descubrimiento constante es lo que más nos gustó de este mapa. Cada calle, cada fábrica y cada colina parecen tener algo que contar. Y cuando se combina con un gran OST, el resultado es una experiencia realmente envolvente.

Inicia una nueva era para Arknights
Después de más de 6 horas de juego, estamos convencidos de que Arknights: Endfield representa algo más que una secuela: es una evolución y hasta una declaración de lo que ambiciona Hypergryph.
El estudio quiere expandir su universo, atraer a nuevos jugadores y, al mismo tiempo, dar a los fans de siempre una nueva forma de vivir su saga favorita.
Hay detalles que deben afinarse, como la sobrecarga de información al inicio del título o la curva de aprendizaje en la gestión. Lo más importante es que el potencial está ahí y es enorme.
Si logran equilibrar la complejidad con la accesibilidad, Endfield podría convertirse en uno de los RPG de acción más interesantes de 2026. Lo mejor de todo es que tendrás la oportunidad de conocerlo a detalle este próximo 28 de noviembre, momento en el que la Beta test II estará disponible para el público.
¿Crees que Hypergryph logrará conquistar a nuevos jugadores con esta propuesta tan ambiciosa? Cuéntanos en los comentarios.
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