The Cursed Crusade PlayStation 3

La fantasía medieval ha sido el tema predilecto de incontables escritores y desarrolladores de videojuegos, pero para que realmente resulte fascinante, en la ecuación tiene que estar presente el elemento fantástico. Y no es que esta época sea un aburrido paradero turístico, considerando las pestes negras, sangrientas inquisiciones y maliciosas cruzadas, es sólo que siempre hace falta un toque de ficción para hacer las cosas más interesantes. The Cursed Crusade sigue la tendencia, envolviéndonos en el conflicto de la Cuarta Cruzada, aunque desde una perspectiva que se preocupa poco por respetar la historia y en su lugar se aprovecha del cliché de guerreros santos contendiendo contra fuerzas demoniacas.

A simple vista y tomando el cuenta el pedigrí de Atlus, pareciera que The Cursed Crusade es un intento por imitar la fórmula de Demon’s Souls, la realidad es que aún cuando tienen muchas similitudes, se trata de un juego completamente diferente.

El parentesco proviene de la mecánica de juego, ya que se trata de acción e intenso hack & slash, pero al igual que en el título de From Software, debes asegurarte de que cada golpe cuente. Y es que en tus manos podrás llevar poderosas armas, pero no se trata de blandirlas sin sentido y esperar sobrevivir. El combate enfatiza la precisión y los golpes certeros, bloquear a tiempo o asestar espadazos en el momento justo es imprescindible. Afortunadamente, no es un juego brutal, tienes permitido fallar y no te verás muriendo cada diez segundos, mucho menos recorriendo distancias kilométricas para recuperar tu cuerpo.

Este sistema de pelea luce bien en términos visuales además de ser muy responsivo en cuanto a control. Y siguiendo la tradición de los juegos de acción, variadas combinaciones de botones dan pie a vistosos combos, movimientos coordinados que pueden acabar en un devastador ataque si es que lo haces correctamente, resultando en extremidades de tus enemigos volando por los aires o sus cabezas rodando.

Otro detalle interesante de las armas es que no tienes una predefinida –como sucede en God of War y Dante’s Inferno–, en su lugar puedes tomar las de tus enemigos caídos, así como la posibilidad de sostener dos simultáneamente para dar pie a nuevas combinaciones de movimiento. Además de la distinción en combos, cada arma otorga diferentes habilidades al personaje, como la combinación de espada y escudo para una mayor defensa, o un gigantesco mazo que causa daño masivo a costa de reducir tu velocidad.

El toque sobrenatural parte de una peculiar maldición que aqueja a los dos protagonistas –Denz y Esteban–, que literalmente abre un portal al inframundo para otorgarles poderes. Estos poderes aumentan conforme progresas en la historia, con lo que podrás torturar al enemigo en formas más diversas y vistosas, aunque deberás pagar un alto precio. Mientras abusas de la maldición, tu nivel de vida baja, úsalo durante mucho tiempo y morirás.

Lo que distingue a The Cursed Crusade de otros títulos similares es la capacidad de jugar en cooperativo –al estilo clásico de los beat'em up en 2D–, ya sea con pantalla dividida o en línea. Puedes jugar solo o con tu contraparte controlada por la inteligencia artificial, pero como quedó demostrado en Resident Evil 5, si la programación es mala, la experiencia resulta frustrante.

Aún le falta mucho desarrollo a The Cursed Crusade –Atlus afirma que lo mostrado al momento es apenas una versión alfa–, afortunadamente eso es suficiente para percatarse de lo prometedor que luce el título. Su mayor virtud radica en el cooperativo, y si logran construir una experiencia sustanciosa y balanceada, este podría convertirse en uno de los mejores juegos de acción del próximo año.