La industria de los videojuegos se ha vuelto recelosa de sus propiedades intelectuales. Hoy, es posible que la policía allane un domicilio si una persona tiene un hardware o software que no debe. Tal es el caso de un vendedor de videojuegos en Reino Unido que recibió una visita hostil por parte de la policía. Esto tras comprar un lote con kits de desarrollo de Nintendo que estaban en posesión de SEGA de Europa y que acabaron en la basura por error.
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SEGA está en la mira por los kits de desarrollo de consolas de Nintendo que terminaron en la basura
Un reporte de Time Extension reveló detalles sobre un caso que se convirtió en un escándalo dentro de la escena de preservación de videojuegos, el cual involucra a SEGA y a la policía de Reino Unido.
Todo parte de una intención de compra por parte de Video Game Preservation Museum, que supo sobre una oferta de un revendedor de videojuegos que tenía en su poder kits de desarrollo y cartuchos de consolas de Nintendo, como DSi, 2DS, 3DS, Wii y Wii U.
El objetivo de los preservacionistas era adquirir el lote con valor de $13,526 USD para evitar que cayera en manos de coleccionistas privados. Esto permitiría su correcto análisis, documentación y conservación.
Sin embargo, en julio pasado la situación de salió de control luego de que se informara que la policía arrestó al vendedor. De acuerdo con las primeras versiones, este sujeto compró el lote con dev kits en un depósito de chatarra.
¿Cómo llegaron ahí? Según el testimonio del vendedor, un trabajador de mudanzas llegó al depósito y dijo que las piezas formaban parte de desechos en una mudanza realizada en las oficinas de SEGA. La sede británica de la compañía japonesa se mudó de Brentford a Chiswick Business Park.
La policía arrestó al vendedor y los kits se recuperaron
De acuerdo con el vendedor, el 14 de julio pasado la policía llegó a su domicilio a las 7:30 AM, golpearon fuerte la puerta y 10 oficiales del cuerpo policiaco de Londres, Inglaterra, lo arrestaron. En ese momento, aseguraron que el arresto era por lavar dinero y que iban tras los kits de desarrollo.
El vendedor mencionó que semanas antes vio interés de un supuesto comprador, pero todo indica que se trató de un investigador que buscaba las consolas y los cartuchos.
Durante su arresto, el vendedor descubrió que los dev kits de Nintendo se aseguraron en secreto por la policía. Después de 48 horas, recibió un documento donde se le pedía renunciar a la propiedad del hardware y software: “2 días después de mi arresto, la policía me envió una solicitud formal de descargo de responsabilidad, donde me pedía, efectivamente, que renunciara a la propiedad de las consolas”.
Sin saber sobre el paradero de los kits y tras el silencio que guarda SEGA sobre este caso, el vendedor considera que la policía hizo un uso incorrecto de los productos. En ese sentido, señala que la compañía japonesa usó a las autoridades para evitar un escándalo.
“Mi preocupación es que la policía no retuvo adecuadamente los bienes. Creo que las órdenes se utilizaron como medio para que SEGA recuperara la propiedad de la que se habían desecho negligentemente. Así, los artículos fueron devueltos a SEGA fuera del proceso legal. Ahora sospecho que ya fueron destruidos. Eso explicaría el muro de silencio: si el público se enterara de que SEGA utilizó a la policía para confiscar una propiedad que compré legalmente, sólo para destruirla, el escándalo sería innegable”.