Gears of War: Reloaded es mucho más que un simple lanzamiento; es un evento que rompe con uno de los paradigmas más antiguos de los videojuegos. Es la llegada al equipo azul de un título icónico en tercera persona ampliamente venerado por el equipo verde. Sin duda, una oportunidad única para que una nueva audiencia sea parte de un fenómeno cultural, incluso cuando su nivel de popularidad es diferente.
Para aquellos de nosotros que crecimos junto al brutal y visceral mundo de Sera, quienes vimos a Marcus Fenix y al equipo Delta-Uno enfrentarse a la horda Locust en Xbox 360, la mera idea de ver este título en una consola de Sony era un hazmerreir, pero no más.
Qué detalle
Desde su debut en 2006, Gears of War se estableció rápidamente como un referente en la industria, sinónimo de acción intensa, grandulones fortachones y mecánicas de juego que, en su momento, fueron revolucionarias. La cobertura como sistema central, las ejecuciones brutales y la sensación de peso en cada movimiento y disparo, todo contribuyó a crear una identidad única. Con Reloaded, los jugadores de PlayStation 5 tienen la oportunidad de experimentar todo esto y más, pero con una capa de pulido y mejoras que aprovechan al máximo las capacidades de la consola de Sony.
El juego se ejecuta en alta resolución a 60 cuadros por segundo filudos durante la campaña. Incluso cuando, en esencia, este paquete no es más que la Ultimate Edition que debutó en 2015, a lo largo y ancho de la experiencia son notables capas adicionales repletas de detalles. Por ejemplo, los escenarios son más pulidos, más nítidos y menos borrosos. Esta nueva fidelidad visual hace justicia a la rica y desolada atmósfera postapocalíptica del juego.
Hablando un poco sobre la historia de Gears of War sentimos que sigue siendo, sin lugar a dudas, uno de sus puntos más fuertes y perdurables. La historia de Marcus Fenix, un héroe caído y encarcelado, liberado para liderar al Escuadrón Delta durante la invasión Locust, es tan emocionante y cautivadora hoy como lo fue hace casi dos décadas.


Aunque la trama puede tener clichés propios de los juegos de acción de principios de los 2000, ha envejecido sorprendentemente bien, gracias en gran parte a su presentación cinematográfica y variedad en el diseño de enfrentamientos y retos. Por ejemplo, resguardarte del Kreel durante la noche, la sección obligatoria con vehículos, las secciones con el martillo del alba, entre otras, son segmentos de juego que te mantienen al borde del asiento, pensando que, lo último que quieres es dejar a un lado el control.
Sin embargo, si algo es verdaderamente memorable son los diálogos y, sobre todo, a sus personajes. Dom Santiago, Cole Train, Baird, Anya Stroud; todos son personajes que se han grabado en la memoria colectiva. Su camaradería son el corazón de la historia. Para los jugadores que experimentan esta saga por primera vez en una consola PlayStation, es una oportunidad única de entrar de lleno en una de las historias más icónicas y emocionalmente resonantes del género de disparos en tercera persona, una historia de sacrificio, amistad y la lucha por la supervivencia de la humanidad. Solo crucemos los dedos para que el resto de las entregas no tarden en llegar.
Por supuesto, jugamos en español latino y disfrutamos de la icónica caracterización del elenco encabezado por Sebastián Llapur y Ricardo Tejedo. Un deleite generacional.
Lo que pudo ser mejor
Como has visto, este remaster no se limita a mejorar un poco los gráficos y la jugabilidad; también incluye una generosa cantidad de contenido adicional. La sección de Extras, por ejemplo, ofrece una biblioteca de cómics de Gears of War y una galería de arte conceptual que se desbloquean al recolectar etiquetas COG dispersas por toda la campaña.
Este incentivo adicional para explorar cada rincón del juego recompensa la curiosidad y enriquece el lore del universo Gears. Además, la inclusión de la opción de juego cooperativo en sofá — una característica cada vez más rara en la modernidad— es un guiño nostálgico que permite a los jugadores revivir la campaña con un amigo a su lado, tal como en los viejos tiempos.
Sin embargo, como cualquier obra maestra, Reloaded no está exento de pequeños problemas. Por ejemplo, a pesar de que el juego se ve una década adelantado a su intención original, hay aspectos que le pesan y lo delatan como una experiencia de su época Nos referimos principalmente a la inteligencia artificial de los compañeros de equipo. Aunque generalmente competente, lidiar con ellos puede ser frustrante.
Del mismo modo, algunos errores menores, como enemigos que se quedan inmovilizados o problemas de colisión ocasionales, pueden interrumpir momentáneamente la inmersión. Afortunadamente, estos problemas son raros y no afectan la experiencia general.
Pero no es lo único que quedó a deber. Por ejemplo, al tratarse de un lanzamiento en PlayStation 5, uno esperaría que se pusiera mayor esmeró en funciones únicas del sistema. Por ejemplo, los gatillos adaptativos y la respuesta háptica nos parecieron que quedaron a deber. Mientras que hay resistencia en los gatillos, no se utilizaron de lleno.
Lo mismo se puede decir de las respuesta háptica. Existe, pero nuevamente, quedó a deber. Se pudo hacer mucho más para hacer notar la diferencia entre los diferentes armamentos o, por ejemplo, transmitir a las manos el pesado andar de los personajes, para que el seco y ruidoso golpeteo de sus pasos, no solo se quede en las orejas, sino que también en las manos.
Una verdadera leyenda llega a PlayStation
Gears of War: Reloaded en PlayStation 5 es mucho más que un simple remaster; es una celebración apasionada de todo lo que hizo grande a la serie original. Ahora, esta experiencia está enriquecida con mejoras que la hacen sentir fresca, relevante y absolutamente esencial para una generación de jugadores que se perdió este momento cumbre en la cultura del gaming.
Para los fanáticos de siempre, aquellos que recuerdan con cariño las noches de juego con sus amigos en Xbox LIVE, es una oportunidad inmejorable para revivir una obra maestra. Para los nuevos jugadores, es una invitación a pertenecer a uno de los universos más ricos y una de las experiencias de disparos en tercera persona más gratificantes de todos los tiempos.
Reloaded es, sin lugar a dudas, una adquisición obligatoria y una joya en la corona de cualquier biblioteca de juegos de PlayStatio 5. Muy recomendable.