El género de los beat’em up está vivo en 2025 y MARVEL tiene ganas de sumarse a este furor retro. Cosmic Invasión es la nueva apuesta de los creadores de Teenage Mutant Ninja Turtles: Shredder’s Revenge. ¿Estará a la altura de ese juegazo?
Un auténtico arcade de los 90
En 2022, Tribute Games se puso en el radar con un beat’em up de Tortugas Ninja que retrataba fielmente los juegos que las hicieron grandes en las arcades. Ahora, es el turno de MARVEL para recibir ese tratamiento. MARVEL Cosmic Invasion tiene un impecable pixel art que es consistente en todo el juego desde los personajes y cinemáticas hasta los menús y la interfaz de usuario. La música te remite de inmediato a la series de los 90 como la de X-men, es épica, estruendosa y nostálgica a la vez. De no ser porque está en una resolución moderna y por algunos de sus personajes, este juego podría fácilmente estar en una sala de arcades en 1995.
Incluso la historia nos remite a la época: una ofensiva sin precedentes amenaza con arrasar la galaxia bajo el mando de Annihilus, líder de la temible Annihilation Wave. Con toda la vida en el universo amenazada, héroes de la Tierra y del cosmos se ven obligados a unir fuerzas en una cruzada épica. Es una trama que entendería cualquiera como solían ser las historias de las arcades o sea es un mero pretexto para golpear insectos espaciales.
Este juego busca abarcar todo y, si bien el gran enemigo a vencer es Annihilus, el juego cuenta con una gran variedad de jefes de todos los calibres desde Taskmaster hasta Thanos. En total, son 15 niveles en los que recorres escenarios finamente detallados con guiños a sus franquicias principales. Desde el Genosha de los X-men hasta Asgard de Thor, todos recorrerán la galaxia repartiendo golpes y rayos de energía.
Superhéroes de todas las eras
Uno de los principales atractivos del juego es la alineación de héroes, en total son 15, que abarcan décadas clave de MARVEL. De los 40 está Capitán América, símbolo de los primeros ideales. Los 60 aportan a Spider-Man, Iron Man, Black Panther, Silver Surfer y Phoenix, pilares de la expansión de MARVEL. De los 70 tenemos a Wolverine, Storm, She-Hulk y Nova, mientras que los 80 suman la intensidad de Venom y el carisma de Rocket Raccoon. Los 90 presentan a Beta Ray Bill, los 2000 a Phyla-Vell y a Cosmic Ghost Rider.
Como ves, no es la típica alineación en la que sólo se incluyen personajes del MCU lo cual es muy refrescante y no sólo por el hartazgo del género de superhéroes sino porque te permite experimentar con muchos personajes y encontrar los que te resulten más efectivos. En el modo campaña, al inicio de cada nivel podrás elegir una dupla de héroes, puedes escoger a tus favoritos o elegir a los que te sugiere el juego. Esto es con fines narrativos, pues las cinemáticas y algunos diálogos dentro del nivel están predeterminadas a personajes específicos aunque es irrelevante en la historia del juego a quien elijas.
Lo que realmente marca la diferencia son las habilidades de cada personaje, todas únicas: con Spider-Man lanzas telarañas, con Cosmic Ghost Rider disparas, con el Capitán usas el escudo, y así con cada héroe. Estas habilidades varían en daño, tiempo de recarga y rango de alcance. Los únicos movimientos comunes a todos son el salto y el golpe de corta distancia. A esto se suma un movimiento defensivo que cambia según el personaje: puede ser una evasión o una cobertura, y en el caso de la cobertura permite ejecutar parrys. Finalmente, cada héroe cuenta con un movimiento ultimate, el ataque más poderoso, que se recarga golpeando enemigos o recogiendo ítems de energía en el escenario.
Siendo honestos y aunque la variedad está muy bien, debemos decir que no todos los personajes se sienten igual de efectivos en el campo de batalla, pues esta diferencia en habilidades no solo radica en su forma sino en su cantidad. Tenemos a personajes que poseen 9 movimientos como Venom mientras que Black Panther solo tiene 5 lo que hace parecer algunos de los personajes son solo de relleno.
Sólo cambiale el color y ya
Entendemos que Tribute Games busque fidelidad a la hora de trasladar los Beat’em up de antaño a nuestros días, pero eso no justifica la falta de innovación. Nada en este juego es realmente memorable, no hay una mecánica o un diseño de niveles que sea distinto. Sí apreciamos mucho el aspecto gráfico de los escenarios y las referencias, pero en cuanto a diseño de niveles todo es lineal y repetitivo.
En este género suele haber poca variedad de enemigos, ya que por volumen sería difícil que cada uno fuera único. Sin embargo, en el último cuarto del juego el reciclaje se vuelve indiscriminado, incluye a personajes fuera de contexto, como los centinelas en la batalla final contra la Annihilation Wave. El mismo soldado del primer nivel aparece repetido en múltiples variaciones, mientras que nuevos modelos o variantes de enemigos dejan de aparecer.
Por otro lado, las razones para volver a jugar son escasas más allá de cumplir los retos de cada nivel en la campaña. El título sólo ofrece 2 modos: campaña y arcade. La diferencia es mínima: en campaña eliges personaje y nivel, mientras que en arcade avanzas en línea recta con los mismos héroes hasta el final, con el único beneficio de contar con 3 continues.
Otro detalle que vemos deficiente son los desbloqueables la mayoría de personajes solo cuentan con una variante de color que actúa sobre el mismo modelo base. Esto funciona para Wolverine o Spider-Man donde podemos ver algunos trajes característicos pero para la mayoría son solo un esquema de colores distinto que no tiene sentido. Sabemos que no todos los personajes tienen la misma cantidad de trajes o variantes en los cómics u otros medios pero nos habría gustado ver a nuestros héroes con variantes emblemáticas como un Wolverine Weapon X o un Spider-man 2099.
El poder de elegir
Una de las mecánicas que menos sentido tiene es el sistema de progresión del personaje. Según tu desempeño en el juego, recibes una cantidad de XP que se transforma en cubos. Estos cubos se colocan en un espacio llamado Matriz Cósmica, y cada uno puede convertirse en distintos premios: una pista musical —que, por cierto, nunca queda claro dónde se reproduce—, variantes de color de los personajes que mencionamos antes, modificadores para el modo arcade o archivos con datos de los héroes, como sus poderes y su primera aparición. El problema es que nunca sabes qué obtendrás al colocar un cubo en la matriz; el resultado es completamente aleatorio, lo que elimina cualquier posibilidad de elegir o planear tu progreso.
Otra cosa que nos parece un meh, son los modificadores del arcade que parece que sólo agrega una capa extra de dificultad que sólo es disfrutable para los jugadores que les gusta el reto mediante cosas como aumentar la cantidad de daño de los enemigos, reducir tu vida o consumir tu barra de vida cuando lanzas un movimiento ultimate. Hay pocos para los que solo buscan divertirse o hacer cosas absurdas y van más ligados a la resistencia de los personajes que al hacer cosas divertidas como ultimates infinitos o hacer a tus personajes cabezones, la clase de locuras que solían hacer en los 90.
Novedad noventera
MARVEL Cosmic Invasion es, sin duda, una carta de amor al género de los beat’em up y a la nostalgia noventera. Su pixel art, música y alineación de héroes lo convierten en un título que podría estar en cualquier arcade de los 90, pero con el atractivo de ver a personajes que rara vez aparecen fuera de los cómics. Sin embargo, esa fidelidad al pasado también es su mayor limitante: el diseño de niveles es repetitivo, la variedad de enemigos se diluye en el tramo final y los desbloqueables carecen de peso. El sistema de progresión y los modos de juego apenas aportan razones para volver a jugar y dejan la experiencia más