Pure es, en esencia, un juego de carreras off-road, pero detrás de su fachada se esconde un género más parecido a los juegos de snowboard y patinetas. Si bien las competencias son lo primordial, ganar no sólo depende de tu velocidad, estrategia y habilidad al conducir, cada salto logres o no, tendrá un gran efecto en la posición en que llegarás al final de la carrera.
Lo principal del juego son las acrobacias que realizas. Es realmente sencillo ejecutarlas, con sólo dar una dirección en el stick izquierdo y apretar un botón te encontrarás dando piruetas que desafíen a la gravedad, a la física y a la cordura.
Sin ambargo, tendrás que ganarte el derecho de acceso a las acrobacias más extremas, iniciarás con la más sencilla que te tomará cerca de un segundo y conforme llenes tu barra de entusiasmo, ganarás acceso a las de nivel intermedio y experto. Si consigues llegar al máximo, podrás ejecutar los movimientos especiales, sólo para saltos realmente grandes y con una duración de cerca de siete impresionantes segundos. Esta no es la única utilidad de la barra de entusiasmo, ya que al apretar otro botón tu velocidad se incrementará considerablemente, lo cual puede darte una gran ventaja.
Desde la altura que puedes disfrutar de paisajes increíbles, las gráficas te sumergirán tanto en el juego, que al final tendrás que lavar tu ropa para quitar todo el lodo que tienes embarrado.
Las carreras cuentan con una con excelente ambientación, tanto musical como visual; tal vez el juego podría perdonar un poco más la improvisación del conductor en los caminos, ya que al desviarte un poco o avanzar unos centímetros en sentido contrario, el juego te colocará inmediatamente donde crea que debes estar.