Gráficas impresionantes, una gran cantidad de personajes, mucho contenido desbloqueable
-Lo malo
La conexión para jugar en línea sigue siendo deficiente
Reseña
En el cierre de uno de los mejores años que hemos tenido en el género de los juegos de peleas, llega Tekken 6. Un título que tiene mucha historia y que por primera vez está disponible para otra consola fuera del PlayStation. ¿Nuevos personajes, escenarios y modos serán suficientes para que el rey del puño de hierro tenga un regreso triunfal?
Desde hace mucho tiempo dejamos de recibir a Tekken en consola, es cierto que llegó el Dark Resurrection al PS3, pero en comparación con el cinco no tenía muchos cambios y sólo nos dejaron deseando más. Por fin, después de tanto tiempo y de estar disponible por bastante tiempo sólo en Japón, llega a nosotros Tekken 6.
Para nuestra suerte, la espera ha rendido frutos, ya que la versión que ahora recibimos es una después de la que muchos conocen como Bloodline Rebellion, así que tenemos un título muy balanceado y con algunos extras más para que valga la pena la espera.
En cuanto a la historia, te puedo decir, si es que todavía no lo sabes, que Tekken podría ser de los pocos juegos de peleas que tienen algo interesante en este departamento. El torneo pasado lo ganó Jin y ahora está al mando del imperio Mishima y cuando creíamos que las fuerzas Tekken serían muy lindas y se dedicarían a repartir chocolates y felicidad por el mundo, nos enteramos de que la bondad ya no existe en Jin, que le declara la guerra al mundo. De manera irónica, la única salvación está en Kazuya y la corporación G, que son los únicos capaces de medirse con el imperio Mishima. En medio de este conflicto, Jin organiza un torneo más donde estará en juego el destino del planeta.
Además de tener una excelente historia, Tekken 6 cuenta con un buen nivel gráfico que tal vez parezca un poco viejo, pero para eso los creadores implementaron un efecto especial llamado Motion Blur que hace que el juego luzca espectacular, pues se ve más rápido, los golpes se ven más fuertes y los movimientos de los personajes parecen más espectaculares, aunque puedes apagar este efecto si eres un jugador más ortodoxo (por no decir aburrido).