A Square Enix lo consideramos el rey de los RPG debido a su amplia oferta de títulos como Final Fantasy, Octopath Traveler, Triangle Strategy, Star Ocean, Dragon Quest y más. Entre su currículum se encuentra la franquicia SaGa, que en Japón es muy reconocida gracias al soporte que tuvo en los 90, pero que en el resto del mundo apenas ha recibido atención.

En un nuevo intento para popularizar la serie, Square nos trae SaGa Emerald Beyond, una entrega que carga con mucha de la esencia de sus antecesoras, y eso incluye tanto lo positivo como lo negativo. Saldrá para todas las plataformas, incluidos iOS y Android, lo que le ayudará a llegar a más gente, pero también le pone muchos topes, por lo que termina siendo una carretera turbulenta.

Los caminos de la vida no son lo que yo esperaba

Uno de los sellos característicos de la franquicia SaGa es que presenta a varios protagonistas, cada uno con una historia propia. Su camino puede cruzarse con el de los otros personajes, ya sea de manera significativa o por pura casualidad. En el caso de Emerald Beyond, tenemos 7 protagonistas con 6 rutas (2 de ellos comparten una misma) y éstas nos pueden llevar a 17 mundos distintos.

Cada personaje comienza en un lugar asignado, y una vez que se nos explica su contexto y motivación, pasamos a la Conexión, que es donde el resto de los mundos se unen. A partir de aquí, es nuestra decisión tomar el camino que queramos. Tenemos que aclarar que no todos los destinos están disponibles desde el inicio, una vez que cumplimos ciertos objetivos desbloqueamos rutas nuevas y así progresamos continuamente.

La razón por la que tenemos que visitar mundos diferentes varía dependiendo del protagonista. Por ejemplo, Siugnas es un vampiro que fue despojado de su trono y mandado a un mundo donde otras personas también fueron exiliadas. Su objetivo es llevar a estos guerreros a sus respectivos hogares, descubrir cuál fue el destino que sufrieron y hacer que se unan a su ejército para que lo ayuden a recuperar su reino.

Otra historia es la de Diva No. 5, que es una androide muy famosa gracias a su bella voz que la convirtió en host de su propio programa de radio y también en cantante. Su vida cambia cuando interpreta una sinfonía prohibida, lo que lleva a que le tengan que borrar la memoría. Como la robot carece de sentido o propósito, emprende un viaje para encontrar su corazón y una nueva razón de vivir.

Lo que SaGa Emerald Beyond hace muy bien es diferenciar cada historia y encontrar la manera de que cada protagonista coincida de manera adecuada, y justifica muy bien cuando pasa. Estas interacciones son interesantes porque, como dijimos, a veces unen fuerzas para cumplir sus metas, aunque en otras ocasiones simplemente cruzan un par de palabras.

El gran problema de esta mecánica es que visitamos el mismo mundo varias veces, lo que llega a ser aburrido y repetitivo. Aunque antes de entrar a cada uno se nos dice de cuál se trata, es inevitable repetir destinos. Como en cada una de las historias tenemos que ir a muchos de estos planetas, por más que evitemos visitar uno que ya vimos con anterioridad, eventualmente terminamos en alguno que ya conocimos.

Esto lleva a que hablemos con los mismos personajes, cumplir las mismas misiones, leer diálogos reciclados y sentir que desperdiciamos nuestro tiempo. Algunos mundos los llegamos a ver hasta 3 veces, por más que los hayamos evitado. Además, un gran problema de SaGa Emerald Beyond es que, en comparación con otros títulos de Square, se nota a kilómetros que no tuvo mucho presupuesto, así que literalmente reutilizan mucho contenido.

En cada mundo hay un mapa que podemos explorar de manera semiabierta. Una vez que escaneamos el ambiente, aparecen las puertas que tenemos disponibles y decidimos el camino que queremos tomar. Estas zonas son medianas y un poco lineales, lo que hace que la exploración sea limitada. Para comenzar una nueva misión, tenemos que ir de punto A al punto B sin algún obstáculo de por medio, lo que es un poco decepcionante.

Una experiencia interminable (para bien y para mal)

El hecho de que en cada aventura tengamos disponibles varias rutas y decisiones no sólo es para que las campañas sean diferentes, sino para rejugarlas varias veces. De hecho, en el menú de selección de personaje nos aparece en cuántas ocasiones hemos completado las historias. Por lo mismo, SaGa Emerald Beyond nos da muchísimas elecciones durante la experiencia, para que la siguiente vez que juguemos elijamos otra y veamos algo distinto.

Por ejemplo, siempre que visitamos un campo en las montañas, debemos descongelar a los habitantes, pero sólo tenemos un número limitado de cerillos para hacerlo. A quien rescatemos define el desenlace de la historia e incluso al jefe final de la zona, así que en caso de volver a visitar este mundo en otra partida, podemos ver una historia un poco cambiada.

Aún así, el problema de la repetición persiste, porque si la primera vez que jugamos todas las campañas tuvimos que visitar alguna zona aunque sea 2 veces, ahora al rejugar todo de nuevo lo volveremos a hacer. Así que volver a pelear contra los mismos enemigos, leer los diálogos otra vez y en general a hacer lo que habíamos hecho se siente como un castigo. Esto nos hace pensar que SaGa Emerald Beyond prefirió la cantidad sobre la calidad.

Se nota que su intención es entregar una aventura que pudiéramos exprimir hasta el final y aprovechar durante docenas de horas. El problema es que para hacerlo recicló varios elementos que, al final, terminan por desesperar. Por lo mismo, nos fue muy difícil rejugar algunas historias, porque eventualmente nos sentimos agotados.

Al perro le faltó dinero para bailar

Como comentamos, hay varios detalles que delatan que SaGa Emerald Beyond no recibió el presupuesto suficiente para cumplir su misión. Es un título muy ambicioso, y se nota, pero muchas ideas tuvieron una ejecución pobre debido a la falta de atención al detalle. El primero está en el arte. Algunos de los juegos recientes de la franquicia optaron por contar su historia con viñetas estilo novela gráfica, y aquí es igual.

El problema es que los modelos de los personajes se ven feos, sin mucha vida y con expresiones frías, grises e insípidas. Así que, mucho del diálogo no logra generar impacto o interés debido a que la intención y sentimiento es muy pobre. Otro detalle que dice un poco sobre el presupuesto del juego es que, al inicio de cada historia, los protagonistas tienen voces con una interpretación muy bien realizada, pero después de un par de escenas, éstas desaparecen y simplemente escuchamos una música de fondo.

Si este fuera un título que se recargara muy poco en su historia, lo entenderíamos, pero hay muchísimo diálogo y la mitad del tiempo estamos leyendo, así que la falta de un doblaje y de personajes expresivos hacen que la historia nunca impacte con mucha fuerza. Es muy incómodo llegar a ese punto cuando los protagonistas de pronto pierden su voz y pasamos horas de silencio.

Otro elemento que delata la falta de calidad en SaGa Emerald Beyond en comparación con otras entregas de Square es uno que ya comentamos: la exploración. Algunas de las animaciones en el movimientos se ven como de juego de Flash; esto se nota sobre todo cuando hacemos la campaña de Siugnas, pero también cuando viajamos en barco y otros medios. Aunque hay espacios que van desde medianos a grandes, no hay nada que hacer más que las misiones principales y secundarias, pero nunca hay algo escondido o que recompense nuestra curiosidad.

Por último, algo a considerar es que el título únicamente está en inglés y japonés, tanto audio como texto. Esto nos resultó extraño tomando en cuenta que hay títulos indies que además de estos idiomas igual están disponibles en español, portugués, francés y demás. Más que una queja (a fin de cuentas, toda nuestra infancia jugamos en inglés) es algo que muchos jugadores deben tomar a cuenta, porque hay muchísimo diálogo y, en caso de no dominarlo, puede ser un obstáculo.

La gasolina de esta máquina

Si la exploración es pobre, la historia poco impactante, las rutas repetitivas y la calidad en algunos detalles deja que desear, ¿por qué valdría la pena jugar SaGa Emerald Beyond? Por su combate. Este aspecto es, sin duda, lo mejor de la entrega, y una de las pocas razones por las que a veces pasaban varias horas sin que nos diéramos cuenta. El sistema es enganchante, y en general se parece mucho al que la franquicia ha empleado en los últimos años, pero mucho más refinado.

Al encarar a los enemigos, nuestros personajes pasan a una formación en línea donde se preparan para atacar. Nuestra meta es alinear o juntar a cada aliado para que formen cadenas que otorgan mucho más impacto a nuestros golpes y generan combos brutales. Cada una de las opciones de ataque de nuestro equipo los hace cambiar de lugar, así que debemos elegir el indicado para que se junten y todo funcione como queremos.

Cuando comenzamos cada combate, tenemos un número de estrellas que decide cuántos movimientos haremos en el turno. Para ganar una nueva estrella, tenemos que cumplir el objetivo que la alineación que elegimos al inicio nos pide; por ejemplo, hay una formación que nos dice que con cada combo que hagamos ganamos un movimiento extra en el siguiente turno, otro nos exige que al menos un personaje se defienda, etcétera.

Nuestros personajes tienen varios ataques que varían su fuerza y también las estrellas que requieren. Las habilidades más poderosas obviamente consumen más combustible. Esto nos lleva a que decidamos si preferimos usar movimientos más fuertes, o si mejor hacemos cadenas más débiles pero largas. El beneficio de optar por la segunda opción es que cada combo se califica, y si supera cierto puntaje, nos dan la oportunidad de tener otro turno, lo que es sumamente satisfactorio.

Tenemos que tomar en cuenta que nuestros enemigos también pueden hacer cadenas. Nos pasó varias veces que, por enfocarnos únicamente en lo que íbamos a hacer, nuestros rivales se acomodaron para hacer combos y nos destruyeron por completo. La posición de los personajes se decide al azar cada que inicia un turno, y así como a veces salimos beneficiados con el acomodo, el contrincante también puede hacerlo.

Todas estas características hacen que el combate de SaGa Emerald Beyond sea profundo, divertido y muy entretenido. Al inicio es un poco intimidante porque hay varios detalles a considerar, pero cuando hicimos click con él nos encantó. Por más que avanzábamos, nunca nos aburrimos de él, e incluso después de llevar varias horas de juego, descubrimos un par de trucos que nos ayudaron a perfeccionarlo aún más.

Otros elementos a tomar en cuenta son la progresión de los personajes y las armas y herramientas que pueden equiparse. Tras cada combate, ganamos experiencia y también ítems que posteriormente podemos usar para mejorar las espadas, hachas y pistolas o también para hacer trueque por otros objetos. Con cada nivel que escalamos y con las armas perfeccionadas, notamos que nos volvemos más fuertes y que nuestros ataques hacen mucho más daño. Esta curva es muy proporcional y escala a un ritmo excelente.

Veredicto

SaGa Emerald Beyond es un título confuso; quiere respetar su historia pero también apuntar a un público más amplio, lo que termina por hacer que se sacrifique la calidad. Igualmente, es muy ambicioso, pero es evidente que no tuvo el apoyo o los recursos necesarios para plasmar todas las ideas que tiene. Esto nos da un juego agridulce, que por momentos es brillante, pero que también llega a ser frustrante.

El título encuentra la manera de contar historias muy diferentes entre ellas que también se cruzan por momentos, y así como a veces justifica sus encuentros, a veces sólo lo hace para dar más contenido, pero éste termina por ser repetitivo e innecesario. Para el final de cada campaña nos fue muy difícil seguir con entusiasmo, pero afortunadamente el combate nos motivó debido a lo fascinante y bien pulido que está.

La intención del título es que rejuguemos cada historia varias veces para ver todas las rutas y cambios que hay, pero tampoco nos da muchos recursos o motivaciones para que lo hagamos sin queja. Esperamos que Square Enix aprenda de esto, porque cualquier fan de toda la vida de la compañía quiere que SaGa siga vigente por muchos años y que su nombre esté en la cima.

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