Como parte de una entrevista reciente con un medio británico, Palmer Luckey, inventor de las gafas Oculus Rift, reconoció que la realidad virtual tardará en convertirse en una forma de entretenimiento popular y enlistó algunos de los obstáculos que enfrenta actualmente. Sin embargo, subrayó que el respaldo de Facebook permitirá a Oculus VR sobrevivir a este periodo de adopción de hasta 5 años.
"Podría ser el siguiente año o podría ser de aquí a 5 años [que la realidad virtual se vuelva popular]." dijo Luckey. "Quizá la realidad virtual no despegue por algún tiempo. Pero la buena noticia es que tener un gran adepto respaldándonos nos permite jugar a largo plazo. En vez de tener que hacer dinero ahora o desaparecer y que alguien más nos reemplace, podemos pensar en lo mejor para la realidad virtual a largo plazo."
Entre las dificultades que Luckey consideró, figura fundamentalmente la escasez de contenido y la necesidad de juegos que se controlen en ausencia de un mando tradicional, situación que sacude los cimientos más elementales del desarrollo de entretenimiento electrónico.
En estos momentos, Oculus Rift va en su segundo prototipo de desarrollo y se especula que éste salga a la venta el próximo año con un costo inferior a $400 USD, pero efectivamente, el detalle de los juegos es importante y no tiene una solución inmediata. Por lo concerniente a controles, circulan rumores sobre el desarrollo de uno al interior de Oculus VR.
Del otro lado está Sony, con Project Morpheus, pero esa compañía ―en apariencia― ya tiene resueltos ambos problemas: goza de una red de estudios fértil y cuenta con PS Move como solución al detalle de los controles.
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