Xbox One y su intento por capturar al hardcore gamer

Las exclusivas, el precio y todo lo que compone a la estrategia de Microsoft


Como lo había prometido, Microsoft sorprendió a los fanáticos de Xbox con una sólida alineación de títulos exclusivos, tanto de desarrolladores first party como de terceros. Y es que la conferencia de Xbox en el E3 2013 estuvo 100% enfocada en los juegos, después de que durante el evento de revelación del Xbox One, la compañía decidiera dedicarse a mostrar las capacidades de la consola como un centro de entretenimiento integral basado en televisión.

Comenzando con la presencia de Hideo Kojima y Metal Gear hasta el anuncio de un nuevo Halo ‒en el que el Master Chief viste un extraño poncho- y Dead Rising 3, el Xbox One demostró tener franquicias para todo tipo de jugador: el amante del sigilo, el fanático de los FPS y cualquier otro. Sin embargo, las pequeñas sorpresas como Titanfall y su gameplay de siguiente generación, que incorpora movimiento vertical a través de los mapas y trabajo en equipo para destruir a los mechas enemigos, son las que aseguran darle a la consola un lugar entre los jugadores hardcore.

Por otro lado, Microsoft parece tener una estrategia bien estructurada, basada en la obtención de nuevas propiedades intelectuales para elevar el interés. Y por esa razón incluyeron títulos F2P como World of Tanks y otros con un modelo tradicional de comercialización, como el antes anunciado Ryse: Son of Rome, Minecraft (uno de los pocos que han podido arrebatarle el primer lugar en la lista de más jugados a Call of Duty en más de una ocasión) y el largamente esperado Killer Instinct.

Otro detalle interesante fue que Microsoft reveló que en el futuro cercano aumentarán los beneficios de contar con una membresía Gold de Xbox LIVE. Aparentemente, Xbox aprendió de PlayStation Plus que a los jugadores nos gustan las cosas gratis y regalarán 2 nuevos títulos cada mes, a partir de julio. Sin embargo, el hecho de que los primeros sean Halo 3 y Assassin's Creed II disminuye considerablemente el atractivo de la oferta, pues salieron al mercado hace varios años. Por otro lado, si tenemos en cuenta que estos juegos no podrán ser disfrutados en el Xbox One, la estrategia termina pareciendo una disculpa atrasada, especialmente ahora que Sony reveló que los beneficios de PlayStation Plus serán compartidos en el PS Vita, PlayStation 3 y PlayStation 4.

A final de cuentas, el Xbox One tiene el potencial de atraer a quienes se emocionaron con la promesa de un decodificador HD de televisión que aumente la experiencia de entretenimiento y ofrezca servicios de DVR y demás; así como a los jugadores que buscan exclusivas y experiencias complejas y profundas. Por otro lado, un detalle que pareció desanimar a algunos fanáticos fue el precio de $499 USD que tendrá la consola ‒y después de que Sony anunciara que el PlayStation 4 costará $399 USD la situación empeoró-. Todo mundo parece olvidar que esta cantidad incluye el nuevo Kinect, lo que acerca un poco el precio de ambas consolas, aunque también habría que evaluar si el gamer promedio realmente quiere y necesita el nuevo Kinect.

La pregunta obvia es si conviene comprar un Xbox One y, en lo personal, creo que la respuesta depende de cada jugador. Si alguna de las exclusivas mostradas te emocionó lo suficiente, o si crees que la oferta de entretenimiento de Xbox y el uso de Kinect no pueden faltar en tu vida, la decisión será sencilla, claro, si tu presupuesto te permite pagar la consola durante su lanzamiento. En mi caso, desde que vi el logo de Dead Rising 3 en la pantalla supe que mi dinero ya tenía dueño.

Comentarios

 
 
  • Mejores

  • Nuevos

    Advertising
    Advertising