Mediante comunicado de prensa difundido esta mañana, Atari US hizo el anuncio de su declaración de bancarrota, recurso mediante el cual busca desprenderse de su insolvente dueño francés Atari SA antes Infogrames y vender la mayoría de sus propiedades; entre ellas Pong y el célebre logotipo que ha portado por más de 40 años, saliendo así libre de deudas para empezar de nuevo.
El proceso de bancarrota constituye la opción más estratégica para las operaciones de Atari US mientras buscan preservar su valor inherente y desbloquear potencial de ingresos inaccesible mientras están bajo control de Atari SA, explica el comunicado. Con este movimiento, las operaciones de Atari en Estados Unidos buscan separarse de las cargas financieras estructurales de su compañía dueña francesa, Atari SA.
Cabe acotar que Atari en Estados Unidos ha sido una empresa rentable a lo largo de los últimos 2 años gracias, en buena medida, a su cambio estratégico de juegos empaquetados al mercado digital; sin embargo, tanto la relación con Atari SA como la dependencia de la firma financiera británica BlueBay Asset Management, ha frenado su desarrollo y disminuido drásticamente su valor accionario.
Aunque ha atravesado por múltiples cambios a través de las décadas, Atari permanece como el último gran sobreviviente de las primeras generaciones de consolas en la década de los 70, siendo responsable por la icónica plataforma Atari 2600, misma que vendió más de 30 millones de unidades.
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