La industria de videojuegos, en su apartado de publicación y distribución digital aún tiene que pulir algunos detalles legales pensando en mercados específicos pues, en ocasiones, las políticas de las plataformas entran en conflicto con las leyes de protección al consumidor. Este ha sido el caso de Steam, la plataforma de Valve en PC, y la Comisión Australiana de la Competencia y del Consumidor, quienes están inmersos en un conflicto legal que parece no tener fin. Ahora, Valve lanzó un comunicado para los usuarios de la plataforma en el que expone algunos aspectos legales.
Luego de que los recursos legales de Valve fracasaran en la disputa legal promovida por la Comisión Australiana de la Competencia y del Consumidor, un juez determinó que la compañía debía pagar una multa de $3,000,000 AUD, aproximadamente $2.2 MDD. Como te informamos, la autoridad australiana considera que Valve engañó a los usuarios de Steam y los privó del derecho de recibir un rembolso por el periodo que comprende de 2011 a 2014, alegato que fue respondido por la compañía argumentando que su mercado es totalmente digital y no tiene obligación de estar regulado según las leyes de ese país.
Dado que el panorama no ha sido positivo para Valve, la compañía decidió publicar un comunicado en Steam para los usuarios australianos que dice lo siguiente: "cuando compras juegos de Valve Corporation siendo consumidor de Australia, esos juegos cuentan con garantías que operan bajo la Ley del Consumidor en Australia y eso no puede ser eludido; además, se incluye la garantía de que los juegos cumplen con un estándar de calidad. El consumidor tiene derecho a un reemplazo o rembolso por parte del distribuidor de los videojuegos por una falla importante y a una compensación por por cualquier otra pérdida o daño razonablemente previsible. También tienes derecho a que el distribuidor de los videojuegos los repare o reemplace si no son de calidad aceptable y la falla no obedece a un error mayor".
Después del comunicado, Valve incluyó una serie de características que deben cumplir los productos según el estándar de calidad de Australia y que, según la compañía, están presentes en los juegos que distribuye a través de Steam:
- Ser seguros, durables y libres de defectos
- Que sean aceptables en apariencia y estén acabados
- Deben cumplir con todos los propósitos para los que se desarrolla un videojuego
- Lo anterior debe tener en cuenta la naturaleza y el precio de los videojuegos y cualquier declaración sobre el empaquetado o etiquetado
Aunque éste comunicado solo queda en texto por el momento, pues Valve tendrá que adecuar algunas políticas de Steam para el consumidor australiano, representa un avance importante en la regulación del consumo de contenido digital en materia de videojuegos.
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